lunes, 26 de septiembre de 2011

Procesiones - I

            España es un Estado laico y aconfesional… la teoría es muy bonita, la realidad social del país es otra bien diferente. España tiene una profunda realidad católica, prácticamente o no, pero realidad católica al fin y al cabo, y Las Palmas de Gran Canaria no es una excepción.
            A poco de tomar posesión, cuando aún no has terminado de aterrizar en el Ayuntamiento, descubres que tienes que organizar la procesión de San Lorenzo, un barrio capitalino del extrarradio que tiene una singular importancia, sus fiestas se consideran Fiestas de la Ciudad por lo espectacular de los fuegos artificiales de la noche del patrón, pero sobre todo por deferencia a que San Lorenzo hasta la década de los años 40 del siglo pasado, fue municipio independiente, anexionándose todo su territorio a Las Palmas de Gran Canaria, y eliminando su ayuntamiento.
            La iglesia no es muy grande, más bien pareciera una ermita, y debido a que la festividad de San Lorenzo se celebra el 10 de agosto, en pleno verano, esto provoca que la afluencia de fieles, además de las autoridades y un elevado número de religiosos.
            Al llegar a la plaza es costumbre que el Alcalde salude a la comitiva de religiosos que ya se ha dicho que son muchísimos. Los religiosos entran en la iglesia justo detrás de las autoridades. Desde que tomé la responsabilidad de la Jefatura de Protocolo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, decidí que en los recintos religiosos las autoridades se ubicarían en la nave del crucero en el lateral del evangelio, por ser una posición más discreta y para así favorecer el acercamiento de los fieles, al desarrollo de la misa.

            Suele ser una misa muy agradable por la juventud de los religiosos oficiantes, lo único malo es el calor que siempre acompaña, por lo que la misa, parece ser interminable.
            Al finalizar la misa las autoridades salen en primer lugar para ubicarse frente a la salida de la iglesia. Justo en el centro de un arco imaginario que en un extremo tiene a la banda municipal y en el otro a los religiosos que han participado en la misa.




            Al salir el Santo, la banda municipal interpreta el Himno Nacional de España y suenan las campanas, tras lo cual da comienzo la procesión. Procesión que se ve interrumpida a los pocos metros, cuando aún el santo no ha comenzado a dar la vuelta a la iglesia.
            En ese momento se paraliza la procesión, y las autoridades son invitadas a ubicarse en una entrada de la plaza desde la cual irán entregando los diversos premios de la feria de ganado. Parece surrealista pero es cierto, los directivos de la Asociación de Vecinos van nominando los diversos premios e invitan aleatoriamente a las autoridades presentes a entregar los galardones, mientras desfilan los orgullosos ganaderos con sus bestias rurales.
            Concluida la entrega de premios, prosigue la procesión que ya pierde todo su orden pues la multitud abarrota las estrechas calles del barrio, hasta completar el pequeño recorrido y volver con júbilo al templo.

            La siguiente procesión en importancia es la de Nuestra Señora de La Luz, en el mes de octubre, importante porque las Fiestas de La Naval, también tienen el carácter de Fiestas de la Ciudad, y además la virgen tiene el título de Alcaldesa Mayor Perpetua de la Ciudad.
            Esta procesión y sus fiestas en general, congregan muchas autoridades y mucha expectación vecinal.
            Siguiendo la norma que había impuesto desde mi llegada al Ayuntamiento, las autoridades cambiaron de ubicación  pasaron de los primeros bancos de la nave central al lateral del evangelio del crucero de la iglesia.
            El orden de precedencias es el determinado por el R.D. 2.099/1983 ostentando la presidencia la Iª Teniente de Alcalde en los dos primeros años y la IIª Teniente de Alcalde en los dos últimos años de la legislaturas, la agenda del Alcalde nunca permitió la asistencia del mismo a la procesión.
            Tras la misa tiene lugar la procesión, denominada como Magna Procesión de la Octava de La Naval, y a la que asisten las principales autoridades.  A la salida de la imagen se le rinden honores y se le interpreta el Himno Nacional por la banda municipal mientras una cuadrilla de Policía Local de Gran Gala saluda protocolariamente a la Alcaldesa Mayor Perpetua de la Ciudad.

            El cortejo procesional es muy grande y queda establecido de la siguiente manera:

                La Hermandades y la Comunidad Eclesiástica ocupan la parte delantera de la procesión, antes del trono de la virgen, y las autoridades ocupan y cierran la procesión, detrás del trono.
                El trono de la Virgen va escoltado por cuatro Policias Locales de Gran Gala.
                La Corporación Municipal desfila en forma de U, para tener un mayor lucimiento. Los extremos, los brazos de la U los cierran los maceros municipales y los miembros de la corporación se ordenan de mayor a menor importancia, los brazos son mayoritariamente la oposición, de menor a mayor, los puestos de los brazos de la U, más cercanos a la base y la propia base la conforman el Equipo de Gobierno municipal.

                Tras la Corporación Municipal va la Directiva del Real Club Victoria y la Comisión de Fiestas de La Naval, verdaderos artífices de las fiestas, y tras estos y orden de menor a mayor importancia las autoridades asistentes, cerrando la procesión la banda municipal. Solo la corporación desfila en forma de U, el resto de invitados y asistentes desfilan en hileras.

                La procesión es muy larga, y transcurre por las principales calles del barrio. Al llegar a la Playa de Las Canteras, poco más de la mitad del recorrido, se procede a una gran descarga de fuegos artificiales, momento en el que desaparecen los maceros y las autoridades. Esta costumbre ya estaba arraigada cuando yo llegué al Ayuntamiento así que no pude más que respetarla y aceptar que la Virgen volviera a su templo sin representación oficial.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Hermanamientos Internacionales / Martinsicuro - Italia (3)

            En octubre de 2010 se perfeccionó el hermanamiento  con la firma definitiva, esta vez en Martinsicuro, donde nos desplazamos el Alcalde Saavedra y yo como Jefe de Protocolo para dar por finalizados los actos formales del hermanamiento.
            Al llegar a Martinsicuro se sumó a nosotros el Cónsul de Italia en Canarias, el Honorable Sr. don Carlos Di Blasio que nos recibió en la entrada del Comune conjuntamente con el Sindaco el Avv. Sr. don Abramo di Salvatore y el gran impulsor del hermanamiento el Coordinador de Cultura el Sr. don Rino Puglia. Ya en el interior nos esperaban el  Asesor de Cultura el Avv. Sr. don Massimo Vagnoni y la Asesora de Turismo la Sra. doña Patrizia Ciufegni. En el salón de plenos se sirvió un pequeño ágape y se atendió a la prensa y se aprovecho para realizar algunas fotos oficiales.
            En la puerta principal se congregó el resto de invitados y autoridades que participarían en el desfile civil hasta el monumento a los caídos en la guerra mundial. En los mástiles oficiales del ayuntamiento ondeaban la bandera de España y la bandera de Las Palmas de Gran Canaria.

            El 14 de octubre de 1943 un fatídico error durante la Guerra Mundial produjo un bombardeo sobre objetivos civiles en Martinsicuro, y por ello fallecieron 24 personas. En el lugar del impacto se erigió un monumento en que cada año se hace una ofrenda en memoria y recuerdo de aquellos ciudadanos pero sobre todo con la conciencia de que no se repita, por eso los grandes protagonistas del acto son los alumnos de los colegios de Martinsicuro.

            Las autoridades locales y los colegios forman un gran desfile desde el ayuntamiento hasta el monumento por los caídos. Los colegios portan estandartes y los representantes del cuerpo de los carabineri  lucen unos vistosos sombreros con penachos de plumas.


            Este acto suele realizarse  siempre el día 14 de octubre como conmemoración de la efemérides del bombardeo, sin embargo en 2010 y como muestra de consideración a nuestro municipio retrasaron la ofrenda hasta el día 23 de octubre ya que la agenda del Alcalde Saavedra imposibilitaba viajar antes a Italia.
            El acto comenzó con las palabras del Sindaco el Avv. Sr. don Abramo di Salvatore que invitó a intervenir al Alcalde Saavedra quien se dirigió a los asistentes en un perfectísimo italiano, para asombro de los ciudadanos de Martinsicuro que no sabían del dominio de la lengua italiana de nuestro Alcalde. Tras las intervenciones de los alcaldes se produjo  la ofrenda floral en memoria de los “caídos”, una vistosa corona de laureles moteada de pequeñas bolitas doradas que la hacían muy llamativa. Los Alcaldes estuvieron firmes ante el monumento durante el minuto de silencio que se tributó a los caídos.
            Luego participaron los colegios que leyeron redacciones alusivas a la paz. El acto acabó con un llamamiento a la paz para que no se repitan bombardeos como el ocurrido el 14 de  octubre de 1943.


            La comida fue en las afueras de Martinsicuro en un maravilloso restaurante cuyos dueños dan sentido al hermanamiento. Él natural de Martinsicuro, ella natural de Las Palmas de Gran Canaria. Uno de los tantos matrimonios entre italianos y canarias que surgió de la estancia de la flota italiana en nuestro puerto.
            Las anécdotas y los recuerdos fueron el tema de conversación de una copiosa comida, muy bien servida y sobre todo con muy buena compañía.
            Por la tarde se visitó la sede de la industria Martintype, que es la mayor industria del municipio. Una moderna industria del sector de la impresión. En su sala de juntas se mantuvo un encuentro con representantes jurídicos, políticos y empresariales del municipio para hablar del hermanamiento y los beneficios que el hermanamiento podría provocar.
            La cena fue reservada, ya que había cursado invitación un vecino de Martinsicuro propietario de un coqueto hotel que habiendo estado de vacaciones en Gran Canaria, había sufrido un grave accidente y fue atendido como si de un familiar se tratase por parte del Cónsul de Italia en Canarias. Al enterarse de la visita de la delegación española cursó invitación oficial. La cena fue muy agradable y emotiva.
            Al finalizar la jornada, nos trasladamos a descansar al hotel Leuco, ya que el Sympathy cierra en otoño e invierno y sólo abre en primavera y verano.
            El día amaneció radiante, como si quisiera asegurar un gran día para el acto forma de la firma del hermanamiento en la Torre de Carlos V. Como se ha indicado anteriormente el edificio más importante y antiguo de Martinsicuro es la Torre de Carlos V, ordenada construir por el Emperador Alemán, a la sazón Rey Español.
            En la puerta de entradas se establecieron las banderas oficiales, donde ondeaban la de España, la de Canarias y la de Las Palmas de Gran Canaria, conjuntamente con las banderas oficiales italianas. En la explanada de entrada se fueron saludando todas las autoridades e invitados, hasta que llegaron los dos Alcaldes para dar comienzo formal al acto, cosa que hicieron después de visitar la exposición que albergaba la Torre con una gran muestra de pintura cerámica.


            En el interior de la Torre de Carlos V y bajo la presidencia del estandarte de Martinsicuro se firmó ratificó el hermanamiento, en doble idioma: italiano y español pero con idéntico contenido. En un gesto de austeridad pero al mismo tiempo de hermanamiento hay que decir que los cartelones de mesa de los dos alcaldes eran los mismos cartelones usados en Las Palmas de Gran Canaria. Con muy buen criterio el Coordinador de Cultura el Sr. don Rino Puglia los había guardado y los había reutilizado.
            Los banderines de mesa eran también los mismos, en este caso habían sido llevados ex profeso desde Las Palmas de Gran Canaria y regalados después al Sr. Puglia.
            El Sindaco Di Salvatore y el Alcalde Saavedra manifestaron una vez más las voluntades municipales ante las autoridades locales y los invitados. Tras la ratificación se intercambiaron los presentes institucionales, no sin antes darle la palabra a quien se han convertido en el verdadero fedatario del hermanamiento en uno y en otro país, el Cónsul de Italia en Canarias, el Honorable Sr. don Carlos Di Blasio.

            Antes de la comida oficial que tuvo lugar en el restaurante L´Aragosta, el Sr. don Rino Puglia hizo de cicerone, produciéndose una singular anécdota. Al Entrar en una iglesia en la zona alta de la Ciudad a modo de fortaleza y atalaya nos tropezamos con la celebración de una boda, aún así visitamos la iglesia. Esta anécdota fue muy comentada en la posterior comida oficial.
            En una mesa gigantesca nos dimos cita las delegaciones italiana, española y las autoridades locales invitadas, en una comida tan copiosa que se prolongó varias horas y que luego obligó a una tarde tranquila y sin ningún tipo de actos.

            Tras una tarde descansando debido al calor, a pesar de ser otoño y lo copioso de la comida, tuvo lugar el último acto oficial del hermanamiento entre las dos Ciudades. Un maravilloso concierto de una banda de un municipio cercano en la iglesia principal de Martinsicuro.
            El director tuvo que sucumbir al público que estaba completamente entregado e interpretar varios bises antes de que los dos alcaldes se dirigieran al público asistente para dar por finalizado el concierto.


            Tras el concierto las delegaciones italiana y española compartieron una jovial cena en el restaurante “Lampara Vecchia”, donde todos mostraron la alegría por la ratificación del hermanamiento entre Martinsicuro y Las Palmas de Gran Canaria.
            Por la mañana tras un desayuno en la que presume ser la mejor cafetería de la Ciudad, justo frente a la iglesia donde la noche anterior se había ofrecido el concierto oficial, y con la bendición del páter que se había sumado a la degustación de croissants, la Delegación Canaria: el Excmo. Sr. don Jerónimo Saavedra, Alcalde de Las Palmas de Gran Canaria; el Honorable Sr. don Carlos Di Blasio, Cónsul de Italia en Canarias; y yo mismo como Jefe de Protocolo, nos dispusimos a atravesar Italia desde el Adriático hasta el Mediterráneo para en Roma coger el avión. Nos acompañó en el trayecto la Asesora de Turismo la Sra. doña Patrizia Ciufegni.  

Hermanamientos Iternacionales / Martinsicuro - Italia (2)

            Como ya he dicho, en la visita de la delegación italiana a Las Palmas de Gran Canaria en octubre de 2009, se firmó el manifiesto de intenciones  para llevar a cabo el hermanamiento de las dos Ciudades. Toda vez que los respectivos plenos municipales habían aprobado el hermanamiento sólo restaba la ratificación formal del mismo con los respectivos actos protocolarios y la firma definitiva.
            Se retiró la bandera insular y en su lugar se izó la bandera de Martinsicuro, como muestra de respeto al municipio hermanado.

            La delegación italiana fue recibida en las Casas Consistoriales, donde a pie de calle, y escoltados por la policía local de gran gala esperaban el Alcalde Saavedra, el Director de Gobierno de Presidencia el Sr. don Sebastián Franquis y el Jefe de Gabinete de Alcaldía el Sr. don Salvador García Llanos, que como se ha dicho era Alcalde del Puerto de La Cruz, cuando Martinsicuro se hermanó con dicho municipio. Acompañados por el Honorable Sr. don Carlos Di Blasio, Cónsul de Italia en Canarias, llegaron el Sindaco de Martinsicuro el Avv. Sr. don Abramo Di Salvatore; el Asesor de Cultura el Avv. Sr. don Massimo Vagnoni; la Asesora de Turismo la Sra. doña Patrizia Ciufegni, y el Coordinador de Cultura y gran promotor del Hermanamiento el Sr. don Rino Puglia, además de la esposa del Sr. Cónsul.
            La recepción fue muy emotiva y cálida y así lo pudieron ver los periodistas locales que aguardaban la llegada y el acto oficial de hermanamiento.


            Accedieron a las  Casas Consistoriales escoltados por la policía local de Gran Gala, y realizaron una visita por el edificio, donde pudieron contemplar el imponente cuadro “Emigrantes” de Ventura de los Ángeles Sala y Virgil, que preside la escalera principal, los cuadros de los Emperadores Carlos V e Isabel de Portugal, y los llamados “Filipinos” de la colección de obras del Museo del Prado.
            La delegación italiana quedó fascinada al descubrir gracias a un cuadro que el compositor Camile Saint-Saëns había vivido en Gran Canaria, e incluso que había compuesto en la isla su obra Sanson y Dalila.

            El Alcalde Saavedra hizo de guía explicando las diferentes obras que alberga las Casas Consistoriales, así pudieron ver las obras de Manolo Millares del despacho del propio alcalde, las obras de Pedro González, de Cristino de Vera, o de Fernando Álamo entre otros. Vieron las viejas dalmáticas bordadas en plata de los maceros y las pesadas mazas en las vitrinas, y acabaron visitando el Salón Dorado. Quedaron gratamente sorprendidos por los tesoros que esconden las Casas Consistoriales.

            En la Sala Millares, se enfrentaron las dos delegaciones para exponer los últimos puntos del hermanamiento y tras dar lectura al documento de firma formal el hermanamiento el Acalde Saavedra invitó al Sindaco de Martinsicuro y al Cónsul de Italia en Canarias a que firmaron en el Libro de Honor del Ayuntamiento, para así dejar constancia de tan notable hecho.


            Tras inmortalizar el acto con la firma en el Libro de Honor del ayuntamiento se tomó una foto oficial y se intercambiaron los presentes institucionales. La delegación italiana obsequió a los miembros de la delegación canaria con unas maravillosas muestras de cerámica. Fue muy emotiva la entrega de obsequios por parte de don Rino Puglia, verdadero artífice de este hermanamiento. El recuerdo de su paso por Las Palmas de Gran Canaria en su época de marinero fue muy emotivo y representaba el por qué de este hermanamiento, pues las relaciones entre los ciudadanos de ambas ciudades se habían forjado desde hacía mucho tiempo.

            En la terraza de las Casas Consistoriales, y aprovechando la benigna climatología local se produjo la comida oficial del hermanamiento, tras un pequeño aperitivo durante el cual se les explicaron las vistas de los riscos de San Juan, San Nicolás, San José y San Roque.

            Por la tarde y aprovechando la presencia de la delegación italiana, se descubrió un placa conmemorativa en el edificio donde estuvo emplazada la sede de la compañía ITALCABLE, justo en la avenida de la Playa de Las Canteras. Con la presencia del Cónsul de Italia, y trabajadores y familiares de la antigua sede  de la compañía italiana, el Alcalde Saavedra descubrió la placa conmemorativa.


            La tarde noche quedó reservada a la inauguración del Mirador Cittá di Martinsicuro, se trataba de la correspondencia a la rotonda que la ciudad italiana había dedicado a Las Palmas de Gran Canaria. En un emplazamiento envidiable se erige el nuevo belvedere en honor de Martinsicuro, con vistas al puerto de La Luz y Las Palmas, el puerto por donde llegaron los barcos italianos y que años más tarde dieron fruto a este hermanamiento.
            En los jardines, aún  desflorecidos por lo nuevo de la obra, se plantaron plantas ornamentales dibujando la bandera de Italia. La banda municipal se encargó de interpretar los himnos de España e Italia, tras los cuales se dirigieron al público el Alcalde Saavedra, el Cónsul de Italia y el Sindaco de Martinsicuro. Tras las palabras descubrieron el monolito donde reposaban tres losas de piedra grabadas a fuego. Una de ellas con la leyenda:
MIRADOR
CITTÁ
DI MARTINSICURO
Ciudad Hermanada & Cittá Gemellata
27 de mayo de 2010

            Las otras dos placas contaban la historia de este hermanamiento, redactado en español e italiano. El texto español lucía el escudo de Martinsicuro, y el texto italiano lucía el escudo de Las Palmas de Gran Canaria. Tras el descubrimiento de la placa la banda municipal interpretó un concierto musical con una selección escogida ex profeso. El concierto tuvo que ser interrumpido cuando apenas llevaban 25 minutos, debido a una tímida lluvia, que no mojaba pero podría haber empapado.

            No habían terminado de recoger los músicos y escampó  repentinamente, lo que hizo surgir algún comentario jocoso y simpático al respecto de lo malo que eran, pero claro todo sabíamos que eso no era cierto, había sido simplemente una adversidad meteorológica.


Esto adelantó un poco la cena oficial con la que se daba por finalizados los actos formales de ratificación del hermanamiento entre las dos Ciudades, ahora sólo restaba la devolución de la visita y la firma formal en Italia.